Los psicólogos no somos lo bastante frÃos para ser cientÃficos, ni lo bastante sensibles para ser artistas. Los psicólogos somos la conexión entre razón y emoción. Vamos, la viva imagen del eslabón perdido. -i Mira, por ahà va un psicólogo! Asà se explica que la gente nos mire con cierto escepticismo. Ahora bien, cuando las cosas se tuercen todo el mundo nos quiere dar conversación. – Oiga, ¿seguro que no me puede adelantar la cita? -¿Adelantar la cita? Bromas al margen, siempre estaré en deuda con mis pacientes. Yo les ayudo a recuperar el bienestar y ellos me permiten prosperar. Pero nunca les perdonaré lo pesados que se ponen cuando ya están bien y les doy de alta. -De haber sabido